"Bruised" es la historia de Jackie Justice (Halle Berry), una ex luchadora de MMA con un prometedor inicio de carrera, pero que dejó el deporte tras abandonar un combate sin dar ninguna explicación. Cuando nos encontramos con ella unos años después, Jackie está limpiando casas y viviendo con su marido y antiguo mánager Desi (Adan Canto). La película pronto deja claro que su relación no es muy sana, pero intenta, al menos al principio, darle una profundidad, como si ella buscara allí la violencia y el conflicto que no tiene desde que dejó las peleas. Esta idea, como tantas otras, se abandona poco después de ser presentada.
Un día, Desi lleva a Jackie a una pelea en la que pretende reclutar a la atracción principal. Sin más motivo que la necesidad de mover el guión en una escena muy mal construida, la protagonista acaba enzarzándose en una pelea con una mujer mucho más fuerte y joven. No tarda, por supuesto, en ser reclutada por un mánager dispuesto a entrenarla para enfrentarse a la actual campeona del mundo, Lady Killer (Valentina Shevchenko, campeona de la UFC en la vida real).
Por si los retos de la preparación para el combate no fueran suficientes, en el guión aún caben un hijo largamente olvidado por Jackie, su compleja relación con su madre, una nueva relación amorosa, el alcoholismo y el mencionado matrimonio cada vez más insostenible.